Evangélicos y unidad de cara a las elecciones de 1 de julio de 2018


El próximo 1 de julio se realizaran las elecciones más importantes de la historia moderna de México por la cantidad de cargos federales y locales a elegir. El padrón electoral, es decir, las personas que podrán participar de esta elección son 89.1 millones de participantes, de los cuales 48.1% son hombres y 51.8% son mujeres.[1] Quienes iremos a votar participaremos en la elección de 18,311 cargos. Entre esos cargos destacan: 1 Presidente de la República, 500 Diputados federales, 128 Senadurías, 8 Gubernaturas, 1 Jefatura de Gobierno, 1597 Presidencias municipales, 16 alcaldías en CDMX y otros 15,088  cargos más.[2]


Según la Encuesta Nacional sobre Creencias y Prácticas Religiosas en México elaborada por ENCREER/RIFREM en 2016, la población evangélica oscila entre el 8% de la población mexicana.[3] De cara a las elecciones esto me genera interés en preguntarme ¿cómo se verá reflejado el voto evangélico el siguiente primero de julio? Al hacerme esta pregunta estoy dando por hecho que el voto evangélico no es homogéneo y que ningún partido político, incluido el Partido de Encuentro Social (PES) goza del monopolio evangélico, aunque quisiera. Seguramente no soy el único que nunca he votado por el PES.  

Viene la elección, hay cuatro opciones a elegir: AMLO, Anaya, Meade y “El Bronco”. ¿Qué candidato recibirá mayor apoyo evangélico?  Alejandro Moreno retoma las encuestas nacionales que el periódico El Financiero realizó en 2016 y 2017, donde se ha preguntado sobre religión, y señala que en:

Las preferencias partidistas según la religión de los entrevistados nos indican que el PAN y el PRI atraen más simpatizantes entre los electores católicos, mientras que los protestantes tienden a preferir en mayor instancia a Morena. Las diferencias no son tan marcadas pero algo dicen: el apoyo al PAN es cuatro puntos mayor entre los católicos que entre los protestantes, mientras que la brecha en el PRI es de cinco puntos. Por el contrario, Morena atrae un apoyo cinco puntos más alto entre protestantes que entre católicos.[4] 

Aclaro que lo señalado por Moreno dejan ver tendencias. En ningún momento son definitivas. Lo subrayo para no comprometer a mis hermanas y hermanos que no simpatizan ni votarán por Morena en la siguiente elección.

Mientras tanto, también nosotros navegamos en la tempestad de las campañas y las encuestas. Sin embargo, ¿Cómo mantener la unidad del cuerpo de Cristo en campañas electorales? No es difícil reconocer que las preferencias electorales se inclinan hacia AMLO o Anaya, incluida las preferencias de la población evangélica. Quien tiene oportunidad de conversar de estos temas con otros hermanos y hermanas en la fe, o echa un vistazo rápido por sus redes sociales, podrá reconocer lo polarizado de la preferencia evangélica. En mi opinión el voto evangélico el próximo 1 de julio se definirá más a partir  del estrato social del votante, la opinión del pastor-cacique, la militancia partidista, la publicad o los medios de comunicación, y menos por asunto de fe. Aun con eso en mente me vuelvo a peguntar: ¿Cómo mantener la unidad del cuerpo de Cristo en campañas electorales?


Finalizo esta reflexión tratando de apuntar algunas ideas prácticas como respuesta.

1.- Amemos por encima de las diferencias de las opiniones políticas. Pongamos de vez en cuando la otra mejilla.

2.- Pensar diferente es una oportunidad para el diálogo y debate, incluso en la iglesia. Aunque ni como sociedad civil y menos como comunidad de fe estemos acostumbrados a ello.

3.- Hablen de estos temas conscientes que la propuesta del Reino de Dios transciende cualquier agenda o partido político.

4.- Rechaza participar en el ciclo de violencia y guerra sucia por temas electorales. Confieso, esto es difícil para mí cuando hay tantos ingeniosos memes circulando por las redes sociales.

5.- En la narrativa bíblica la mentira siempre es condenada. El salmista dice: “Aborrezco y desprecio la mentira…”. Que eso nos sirva de guía y advertencia al publicar y circular “fake news” en redes sociales.

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