En cartelera
¿Qué ha de quedar del hombre consumista insatisfecho, ahora que la maquina creadora de ídolos los está destruyendo delante de nuestros ojos? Es la readaptación hollywoodense del mito de Cronos devorando a sus hijos y que Goya nos dejó una escalofriante interpretación en uno de sus pinturas oscuras. Acudimos sorprendidos a la muerte de los dioses, al desierto de creatividad, a donde no podemos sacudirnos la inseguridad presente ni la desesperanza en el futuro. Todo esto es una bella metáfora de nuestros tiempos, sí así queremos verla. Interpreto el completo desencanto en la divinidad, necesitada del hombre, cansada, humanizada y presa –como el hombre cread- del caos presente que consume lo mismo a los hombres y dioses. Sin nadie a quien rezar el panorama es desconsolador, no hay razón para orar, el cielo está vacío y nosotros simplemente abandonados a nuestras propias fuerzas, la completa libertad para decidir en donde terminar la corta existencia. Un rayo de esperanza, ¿aú...