Me encantan las citas!
Y es que lo emocionante es lo desconocido del momento, lo valiosa de la otra persona, lo importante que es para ambos conocerse, saberse indispensables el uno para el otro; los temas de conversación, los gestos, el lenguaje corporal y de los silencios; en pocas palabras, el inicio de la creación de un lenguaje nuevo que sólo cifran los dos y desconocido para el resto del mundo. Me emociona agendar citas, y no pienso solamente en aquellas de amistad o románticas, sino en algúnas más importantes, que repercuten en la eternidad, es decir, aquellas en las que otras personas se encuentran por vez primera con Jesús... sí, pienso que esa son las mejores citas, cuando estás frente a ese personaje, cuando lo observas detenidamente, por primera vez y escuchas sus palabras o, cuando después de un tramo del camino él te dice: "Bien, ahora vamos a un lugar desierto para platicar"... simplemente me encantam las citas con el Maestro, mi familia, mis amigos y contigo...