En camino a la paternidad y maternidad
“Son los hijos herencia que da el Señor, son los descendientes una recompensa. ” Salmos 127:3 En noviembre del año pasado nos atropelló la alegre noticia de que en el vientre de Alejandra crecía ya una nueva vida. Ya, ahí dentro, maravillosamente una célula se multiplicaba y multiplicaba, la vida floreciendo ante nuestros ojos absortos. Una persona viene en camino para habitar con nosotros y nosotros por siempre con ella. Nuestro hijo o hija crece sorprendiéndonos día a día. Es un misterio desarrollándose, una persona también distinta que aún no conocemos pero amamos profundamente desde ya. Ahí dentro, en la seguridad que proporciona mamá, tú también te vas encontrando y conociendo hija o hijo nuestro. Y a pesar de las distorsiones del ambiente donde ahora vives, el mundo exterior te llega cada vez más en luces y sonidos. Y tú vendrás al mundo, como tu padre, que también le da por hacerle de poeta escribió: “ Nace violentamente el ser humano al mundo ...