Entradas

Mostrando entradas de marzo, 2011

Pero llevatelo también!

Adiós marzo, te vas pero dejaste calor! Llevatelo contigo! Ahh... falta para invierno...

Un lugar de esperanza

Ayer pasó frente a mí el destino, cual niño perdido llevado de la mano por la duda, su nodriza más estricta, y ni en él ni su andar hallé tu brillar; lo vi tan frágil, tan ingenuo e inocente a tal grado que desconfié de él y su paso. De seguirle me perdiera a mí mismo y moriría sin encontrarte, sin probar un instante que sepa a nosotros. Dios que extenderás cielos nuevos, la promesa de justicia es un sueño de esperanza entre las tormentas de la caída y el cansancio del camino… aquí hay un desierto que necesita tu agua… un silencio que espera tus palabras… una creación que aguarda tu redención… un pueblo que te espera… una historia a la espera de ser juzgada…

En voz audible

Las palabras que más me han hecho temblar, llorar, reir, aquellas que más recuerdo, que más aprecio son las que me dijeron en voz baja; las palabras que más me lastimaron, las que más me hicieron sufrir me las gritaron. No hay duda, no hay duda. Y es que las palabras dan mensaje, pero la forma en la que las decimos también, un "no" podría estar diciendo "sí", y un "estoy seguro" un "no lo sé". Por eso hay que apuntar y caminar en honestidad. Pero las palabra más bellas las he escuchado a mis oídos como susurro, la opresión que lastima es un grito. Por eso al pueblo se le dijo: "Escucha Israel, el Señor tu Dios, el Señor uno es". Y después del viento tormentoso, el fuerte terremoto y el fuego consumidor Dios encontró a Elias, en su depresión, dentro de la cueva, en una suave brisa. Hablar como susurro implica reconocer al otro cerca, dejar de gritar, despojarse del poder sobre el otro, es no tener autoridad para ser escuchado; implica, ...

Otra forma de andar la ciudad

Imagen
Me gusta caminar Tijuana con los audifonos en mis oídos, la música me pinta diferentes las calles y banquetas, hace resaltar los detalles, los absurdos, los olvidos, y le da significado a los baches. No sé, la compañía de Vivaldi, Mozart, Beethoven, Bond, Era o Pink Floyd hacen ameno andar las banquetas.

Cuidame

Imagen
Acabo de escuchar esta tierna canción de ese par de señorones Pedro Guerra y Jorge Drexler... espero la disfruten como lo hice yo...

A quien Jesús amaba...

Me siento amado, amado por Dios, por mis padres, por mis hermanas, por mi familia, por mis amigas y amigos, por los hermanas y hermanos de la congregación, por mis compañeros de trabajo, incluso por algunos de mis estudiantes.... ...no sé, tal vez exagero o hago gala de mi presunción, pero me siento amado, y no es invención mía, es obra de Dios, y por eso me siento amado, porque él primero me amó...

Otra ronda de preguntas y respuestas

Imagen
¿Que enseña del amor la espera? ¿Qué nos dice del que ama y del amado? Cuál verdad se revela en el silencio, ¿el pretexto para el desencanto? ¿El alimento de la esperanza? Acaso es el lugar de los sueños y la energía de la entrega lo que yace como oculto en lo oscuro de la ausencia de palabras, ¿qué guía hay para seguir remando? ¿Cuál estrella observar? Hay mucho de espera, y la seguridad de llegar y no hacerlo es la misma. ¿Qué enseña del amor la espera? “Paciencia”, un poco, me atrevo a responderme, “¿Paciencia? ¿Más?”. Paciencia en este momento es como nada, no es producto, sino algo indispensable para poder sobre llevar este tiempo; ¿sin ella nada, con ella todo? “De loco”, me alcanzó a responder inmediatamente después de escribir esa línea. ¿Qué es el amor? es Dios con un manto de dolor; amar es mi voluntad para decidirme quedar en el lugar donde duele, amar duele… amar entonces es decidirse quedar por voluntad propia en el lugar más vulnerable, esperar con esperanza, a ...

Siempre, claro que sí, ¡Siempre!

No hay ocasión en la cual después de leer los textos de mis herman@s y amig@s mi ser no se conmueva, sus palabras siempre me llenan de aliento y esperanza, tal vez porque compartimos los mismos anhelos, las mismas ansias de justicia y la misma fe; ellos y sus huellas-letras son un bello regalo de Dios para andar el camino. Aquí los veo, caminando firme, otras veces rastros de algunas de sus caídas, de momento la nieve pareciera cubrirlas, pero resurgen más adelante, otras veces no están, porque alguien los lleva cargando, algunas más veo sus huellas profundas en dura tierra y es porque me van cargando... Sepan todos que los leo (Areli, Yicel, Ale, Ada, Samy, Meli) y yo también sé que ustedes pasan de vez en vez por aquí... Sigamos hablando y dejando huella de esto que lloramos, guardamos silencio, nos incomoda, nos alienta y nos anima. Que la pluma puede más que mil bombas.

Los libros, ideas y experiencias....

El título es definitivamente muy pomposo para el contenido, así lo pienso, quizá alguno de ustedes me podrá desmentir, no lo sé, ocurrirá como la mayoría de las veces, guardarán silencio... Pero ahora que "me dedico enseñar a enseñar historia" a adolescentes no puedo dejar de pensar que la teoría se reajusta a la práctica, incluso llego a pensar que comprendo mejor algunos detalles de mis clases de teoría en la universidad. Pareciera que regresé del mundo de las ideas como quien se despierta un buen día de un plácido sueño, la verdad, tenía razón aquel doctor español que Pedro y yo conocimos y admiramos en Ciudad Juárez hace ya dos años: "Los historiadores somos un pequeño tornillito en la maquinaria", recuerdo con suma lucidez sus palabras en su natal acento. ¿Qué es la historia para un estudiante en secundaria? ¡Fechas! ¿Qué es lo más importante para dedicarme a enseñar? ¿Cómo hacerlo? ¿Qué espero? Pregunta tras pregunta me martilla la mente como gota de agua tic,...

Una miradita al espejo...

Aprendí el lenguaje de la serpiente, el rostro de piedra indígena, mi abuela, a aplicar mis manos al trabajo como mi padre, que los detalles siempre son importantes, según mi madre. Y del Nazareno amor y compasión, en una palabra: perdón y saber que es necesario también darlo. De mis maestros a leer y escribir el tiempo, de los amigos a escuchar y de todos los libros a valorar las ideas. Feui un niño feliz, un adolescente inquieto y soñador, enamoradizo. Me formé entre amigos, buenos recuerdos, muchos perros, trabajos, sábados en el parque domingos en la iglesia, las mesas de los sobreruedas en las calles los martes y jueves de regreso de la escuela. "No hay nada que no haya quedado fuera del control", me dijo Jesús cuando me abrazó. Por eso ahora vivo y aquí estoy, por él, por conocerle. Me gusta caminar, sigo soñando, escribiendo... ... andando, pues el acto de la escritura es sencillamente eso, dejar huellas de nuestra existencia...